Los Sistemas
Regionales de Conservación
Evolucionando y
descentralizando para conservar nuestro legado
En los últimos años,
distintos gobiernos regionales del país han empezado a discutir, regular y
aprobar el establecimiento de sistemas regionales de conservación en su ámbito
jurisdiccional (p.e. Loreto, Piura, Amazonas, Tumbes y Cajamarca). Si bien estos
sistemas no se enmarcan en una legislación particular y específica, han
empezado a desarrollarse en el marco de competencias regionales para gestionar
las áreas de conservación regionales y el rol que les corresponde para el
ordenamiento territorial, la protección de la agrobiodiversidad, los recursos
forestales y pesqueros, la protección de fuentes de agua, el mantenimiento de
los servicios ambientales, y de gestión ambiental en general. Algunos han
empezado a delinear y proponer Autoridades Ambientales Regionales, donde se
incluirían todos estos temas, además de las competencias como la aprobación de
instrumentos ambientales (Declaración de Impacto Ambiental, Estudios de Impacto
Ambiental semi-detallados, entre otros para actividades como minería artesanal
y pequeña, por ejemplo)
Estos sistemas, sin embargo
tienen aún más preguntas que respuestas, derivadas de vacíos o imprecisiones
legales respecto a los roles de los gobiernos regionales frente a cada tema, de
la escasa institucionalidad desarrollada y la cuestionable viabilidad de
sistemas que integran áreas, recursos, procesos ecológicos y servicios
ambientales cuyas autoridades y procesos de planificación no necesariamente
casi siempre están -hoy en día- naturalmente articuladas entre sí, y en muchos
casos se han replicado los errores del gobierno nacional a menor escala, pero
que lo hace mucho más visible.
El objetivo mismo del
Sistema Regional de Conservación puede depender de las particularidades de cada
Departamento, pero como punto de arranque vale destacar que, sin importar los
objetivos que se quieran alcanzar, la noción del “Sistema” partirá de reconocer
que para alcanzar los objetivos se requiere articular distintas actividades,
competencias, marcos normativos, niveles de gobierno, etc. y entonces la mejor
manera de organizar esta necesidad, es a través de un Sistema.
Por
tanto, hoy en día y dependiendo de las peculiaridades y realidades propias de
cada región y de los departamentos, estas deben responder varias preguntas:
·
¿Qué busca
proteger un Sistema Regional de Conservación?
·
¿Cómo se
gestiona el Sistema?
·
¿Quién
“articula” el Sistema? y ¿cómo se articula este sistema?
En base a lo cual, si bien
lo ideal serían lineamientos básicos y modelos similares, nuestra realidad y
nuestra diversidad no solo en culturas, geografía, climas y diversidad
biológica, nos debe llevar a plantear propuestas acorde al contexto y cercana a
la realidad que nos permita que responsan adecuadamente y con elementos
pertinentes, a fin de que éstos sistemas sean funcionales y eficaces.
Hay por tanto en este
momento una fuerte necesidad de apoyar los procesos en los departamentos a fin
de que tengamos institucionalidad adecuada y que nos permita gestionar nuestro
patrimonio natural, que nos permita asumir el gran reto de ser actores y
ejecutores de nuestro desarrollo.
Descargar documento: Elementos para
conceptualizar los Sistemas Regionales de Conservación.